Caso "Varginha" (Brasil)
SÍ HUBO ATERRIZAJE OVNI


Dedicado a Willy Smith y Virgilio Sánchez Ocejo, que creyeron en mí desde el principio. 

El "lado oscuro" de lo ufología no siempre tiene detrás intoxicadores profesionales, servicios de Inteligencia, o "tontos útiles". A veces - como el caso que ahora me ocupa- el "lado oscuro" tiene otra cara. El rostro de los "torcidos". Gente inepta -supuestos investigadores serios y rigurosos- que, llevados por envidias, celos o conductas paranoides, ataca la labor de otros ufólogos, concentrando todo su veneno en los insultos personales. Esto fue lo sucedido en Brasil en 1996, a raíz del hallazgo de unas huellas en las proximidades de la localidad de Varginha, en el estado de Minas Gerais. Trataré de sintetizar los hechos, cerrando así lo que fue una lamentable campaña de unos pocos contra mi persona. Estoy seguro de que el internauta sabrá sacar las conclusiones correctas.

Noviembre de 1996.

A primeros de ese año (1996), la comunidad ufológica se vió sorprendida por una noticia espectacular: una o dos criaturas "no humanas" pudieron ser capturados por el ejército brasileño. Habían sido vistas en la citada ciudad de Varginha. Pues bien, en noviembre (día 12), en compañía de varios amigos, de mi esposa y mi hijo Iván (periodista y fotógrafo profesional), por pura curiosidad, me trasladé a Varginha.

Localización de Varginha (Brasil).

No era mi intención reinvestigar el suceso. Una de mis que normas consiste en no entrar jamás en un caso que haya sido estudiado por otros investigadores. Entiendo que la ética y el sentido común así lo exigen. Sólo pretendía, como digo, echar un vistazo lugar. En esa oportunidad me acompañaron dos ufólogos locales: Aníbal Alburquerque y Tadeu Pinto Mendes. Recorrimos los diferentes escenarios, tomamos fotografías y al llegar al lugar donde, supuestamente, había sido capturada una de las criaturas, pregunté a Aníbal si la zona fue explorada. ¿Se había encontrado algún rastro? ¿Quedaban marcas o señales de la criatura o de sus capturadores?.

Aspecto de la criatura

Aspecto de una de las criaturas supuestamente capturadas en Varginha, según descripción de los testigos.

Alburquerque no supo qué responder. No tenía noticia de que el paraje hubiera sido rastreado. Y dejándome guiar por el instinto (son casi treinta años investigación ovni) sugerí al grupo que nos adentráramos en la zona. El lugar, muy próximo la ciudad, es una ladera notablemente empinada (entre seis y ocho grados de inclinación), sin cultivar y prácticamente despejada, sin árboles ni maleza. Nos desplegamos y, al poco, fui a tropezar con un boquete que me llamó la atención. Habían transcurrido nueve meses, sí, desde los sucesos de Varginha y, sin embargo, aquella huella era extraña. La examine con detenimiento y comprobé que medidas y forma no parecían muy normales: 20 centímetros de diámetro por dieciocho profundidad. Estructura perfectamente cilíndrica. Paredes lisas, sin un sólo indicio de golpes provocados por azadones o cualquiera otra herramienta agrícola.

He visto decenas de huellas de aterrizajes ovni y "aquello", en principio, parecía coincidir con lo que llevo estudiado. Pero, obviamente, convenía ser cauto. Y proseguimos al rastreo. Minutos más tarde, a casi nueve metros, apareció un segundo boquete. Forma, medidas y aspecto de las paredes me dejaron igualmente perplejo: 24 centímetros de diámetro (en superficie) por otros veinticuatro de profundidad. Figura tronco cónica. Diámetro en el fondo de la huella: 20 centímetros. Paredes similares a la primera. Curiosa y sospechosamente, el sector norte de esta segunda marca seguía la dirección del terreno; es decir, no perpendicular al plano inclinado (Angulo de inclinación: entre treinta y cuarenta grados). Aquello, en efecto, era muy extraño. Y tal y como intuía, otro de los miembros un grupo no tardaría en ella una tercera marca. Está, a diferencia de las anteriores, presenta un diámetro mayor (40 cm), con una profundidad máxima de diez. Las tres huellas formaban un triángulo isósceles casi perfecto: 8,90 metros por nueve metros por 11.15 metros. 

Primera secuencia de fotos durante la investigación en Varginha.
Se incluyen tomas del cuaderno de campo de J.J.Benítez.

Los dos investigadores de Varginha que acompañaron a J.J.Benítez: Aníbal Alburquerque (izquierda) y Tadeu Pinto Mendes.
(Foto: J.J. Benítez)

 

El lugar donde encontramos las huellas. En primer plano, un opurtuno campesino que pasaba por la zona. Obsérvese el azadón que lleva sobre el hombro...

 

Tadeu (de espaldas) y Aníbal, mientras procedíamos a las mediciones. A la izquierda -señalada con la flecha-, la cerca de estacas donde, supuestamente, fue capturada una de las criaturas. Distancia a las huellas: 30 metros.

 

Una de las huellas. paredes lisas, sin marcas de azadones.

 

Aníbal Alburquerque, en primer plano, señalando la huella número tres. Blanca, mi esposa, en la número dos y Carmen Barreto, de la editorial Mercuryo y J.J.Benítez (junto a uno de los árboles), en la huella número dos.

 

Apuntes en el cuaderno de campo de J.J. Benítez.

Apuntes en el cuaderno de campo de J.J. Benítez.

Algunas de las anotaciones tomadas sobre el terreno por J.J.Benítez.


Toma de muestras.

Como es lógico, a la vista de lo anormal de dichas marcas, y dada la proximidad del punto donde, supuestamente, fue capturada una de las criaturas (alrededor de 30 metros), traté de apurar el examen de las mismas, procediendo a las correspondientes mediciones y toma muestras. Varias horas más tarde, concluida aquella primera investigación, intente hacer balance de lo encontrado.

Y, francamente, todo coincidía: tres huellas formando un más que sospechosos "triángulo"; unos boquetes en terreno duro y apelmazado, con unas medidas y profundidad que no parecían corresponder a nada natural; paredes interiores lisas, sin las lógicas señales que hubiera provocado un azadón; ni rastro de tierra las proximidades de las huellas; una tercera marca (la número 3) mucho más grande de escasos diez centímetros de profundidad. Como digo, todo encajaba en lo que a un aterrizaje ovni se refiere. Dado el desnivel del terreno, parecía como si dos de los soportes del objeto se hubieran asentado violentamente en el mismo, mientras el tercero (la marca número 3) compensaba la inclinación dejan una huella más ancha y, obviamente, menos profunda.

Pero todo esto, claro está, sólo eran especulaciones. Simples hipótesis de trabajo. Era menester esperar. Ante un caso tan delicado, lo mejor era poner las muestras de tierra, insectos, plantas, etc. en manos de los expertos, los científicos de las universidades. Y así fue.




Regreso a Sao Paulo.

Dos días más tarde, el jueves 14 de noviembre, lógicamente inquieto ante lo que habíamos descubierto en Varginha, me puse en contacto con un veterano investigador brasileño: Claudeir Covo. Le invité a cenar y, durante casi dos horas, le expuse el asunto, mostrando las características de las huellas y sugiriendo que se desplazara a Varginha, con el fin de completar las pesquisas. Entendí, sencillamente, que el hallazgo debía ser compartido y estudiado en profundidad. Y quién mejor que los propios ufólogos brasileños...

Desde el primer momento, Claudair Covo, investigador de Sao Paulo, recibió toda la información que obraba en mi poder. Y le sugerí que completara la investigación.
(Foto: J.J.Benítez)

Una cruel y demencial campaña.

Pero me equivoqué. Al regresar a España, al poco del hallazgo en Varginha, mientras las universidades y expertos trabajaban en los análisis de las muestras, asistí perplejo a una campaña difamatoria por parte de tres o cuatro investigadores brasileños. El asunto saltó a los medios de comunicación y, por supuesto, a Internet. Y durante meses tuve que soportar lindezas como éstas:

* "J.J. Benítez interpretó huecos de azadón como aterrizaje de UFO...".
* "Lo que encontramos en el lugar sólo eran los huecos abiertos por azadón manual y un tercero, más grande, donde tal vez antes había un nido de termitas".
* "...Son visibles los montones de tierra cerca de los agujeros. Prueba de que la tierra fue tirada y dejada allí mismo".
* "J.J. Benítez aseguró a Claudeir Covo, que todo el terreno estaba quemado".
* "El árbol que J.J. Benítez describe, realmente existe. Fue quemado en uno de los lados, pero es una quemadura normal, común para los campesinos de aquella región. El árbol está vivo, con hojas verdes".

(Ubirajara Franco Rodrigues y Claudeir Covo, ufólogos)



*"Además de precipitarse, Benítez quiere desprestigiar la imagen de los ufólogos de Brasil, sugiriendo que somos unos ineptos. Él no puede hablar de algo que no conoce"
*"J.J. Benítez pretende escribir un nuevo libro"

(Eduardo Mondini, presidente del CEPEX (Sumaré)).

*"El referido español (J.J. Benítez), en su última visita a Brasil, se atrevió con una aventura - esta vez "en la vida real"- bastante deplorable".
*"Fue al el sur de Minas, de manera furtiva, para encontrarse con dos individuos infelices y necesitados de atención, que lo acompañaron y hasta le mostraron sitios equivocados..."
*"...Trabajamos intensamente en las pesquisas del "incidente Varginha", ya por cuatro años, y sabemos perfectamente que en el lugar donde este señor español hizo la pesquisa, "ni de lejos," sucedió tal hecho ("alta miopía en investigación de campo")".
*"Me dejó perplejo, intentando entender lo que llevó a un escritor famoso perpetrar tal acto..."
*"¿Por qué no buscó a los investigadores que estaban en Minas, para enterarse de los acontecimientos? ¿Por qué emprendió esta forma de visita, tan zorra?."
*"La comunidad ufológica brasileña se pregunta por qué este señor se prestó a una actitud tan frívola. ¿Sería por conseguir una ganancia desenfrenada? ¿Sería porque piensa que en Brasil sólo hay indios que no saben estar a altura de la "sapiencia europea"?.
*"Pienso que este señor español ha querido enriquecerse, aprovechándose de nuestra labor".
*"Llevar información engañosa al público es algo que jamás será permitido; no sólo por mí, sino por toda la comunidad ufológica brasileña".
*"En este evento de este señor presentará sus descubrimientos estarán presentes muchas personas que le desmentirán en público".
*"Es importante resaltar que el referido escritor español consiguió una gran antipatía en la comunidad ufológica brasileña y mundial pues yo mismo y muchos otros ya nos encargamos de quitarle la mascara. Todo el mundo ya sabe lo que hizo..."
*"El desinterés por sus futuras obras está ya registrado. En la comunidad ufológica mundial, él no vende más un huevo".
*"Venir aquí, a Brasil, para alardear con una mentira, descaradamente..., es un gran anti-marketing... Sus obras serán ampliamente boicoteadas".
*"Lo siento, pero este Sr. ha caído en el más absoluto descrédito. Agujeros para construcción de cercas de alambre con espinos (abandonadas) y hormigueros (quemados con aceite) jamás serán evidencias científicas, para confirmar el aterrizaje de una nave alienígena".
*"Por favor, no crea que quien escribe está de alguna manera celoso con el referido "aventurero español". Lejos de esto, yo y otros muchos estamos, sí, ofendidos con "tamaña cara de palo" de este señor que viene a Brasil a "coger carona" ". (Se refiere a que viajo sin pagar y acudo a fiestas sin ser invitado).
*"Tal vez el coraje de este español haya sido adquirido al asistir a las "toradas" de Madrid... Pero todavía está en Brasil para protagonizar otro espectáculo circense y marcharse feliz de la vida..."
*"El referido español debe de estar confundiendo nuestro pesquisas con el desorden en las fiestas de Pamplona. Allí mismo, a veces, las cosas no acaban bien...".


(Vitório Pacaccini, investigador de Minas Gerais)


*"Dr. Benítez: quien no ha visto Sevilla, no ha visto maravilla, quien no ha visto Granada no ha visto nada y quién no conoce Brasil puede decir cosa vil".
*"Resumiendo: esto es lo que dá pesquisador extranjero desavisado, cuando no metido a doctor sabelo-todo, al llegar por aquí con aires de "dueño del mundo"...".

(Philippe Piet van Putten a la revista "Planeta"; 30 de noviembre de 1999).

La verdad es que responder a la mayor parte de estas estupideces y groserías sólo sería una pérdida de tiempo y energía. Los que me conocen un poco saben que ese no es mi estilo. Es más: me dí una especial prisa en comunicar el descubrimiento a un hombre como Claudeir Covo, sobradamente reconocido por su seriedad y buen hacer en investigación. Pero, como decía, me equivoqué. Una vez más pequé de ingenuo, compartiendo un hallazgo. No se preocupen: no volverá a suceder. Prometo no cometer el error de dar publicidad a lo que, indudablemente, puede ser un valioso hallazgo que, en cierta medida, ratifica lo que se dijo sobre el incidente Varginha. 

Segunda serie de fotografías tomada durante las mediciones.

Las tres huellas formaban un triángulo rectángulo. A la derecha, en primer plano, un árbol muy cercano a las huellas. De él se tomaron igualmente muestras para su análisis.

 

J.J.Benítez y su esposa en el lugar de los hechos, junto al boquete número dos.

 

Una de las tomas de muestras del fondo de las huellas.

 

En principio, ni el lugar, ni tampoco los boquetes, presentaron alteraciones magnéticas.

 

Falsedades y manipulación.

Sí voy a prestar atención a varios puntos manejados por estos ufólogo locales de Brasil y que, en mi opinión, son falsos o están gravemente manipulados. Veamos:

1.-¿Cómo pueden practicarse orificios cilíndricos, casi perfectos, con un "azadón" de mano? ¿Qué se pretendía cercar en un "triángulo" de nueve por nueve por once metros en un terreno con desnivel tan acusado?.

2.-Las cerca más próxima, situada a unos treinta metros del "triángulo", fue confeccionada con estacas y orificios que oscilan entre los seis y ocho centímetros de diámetro. ¿Es lógico cavar agujeros de 20 y 24 centímetros de diámetro y 18 y 24 de profundidad, respectivamente (huellas número 1 y 2), para plantar estacas de seis u ocho centímetros?. Por cierto ¿Dónde estaban las estacas de marras?.

3.-Ninguno de los presentes en la investigación -y la observación se prolongó desde las diez horas hasta casi las 19- vió señal alguna de termitas, ni restos de hormigueros..., en muchos metros a la redonda. Por cierto, ya que más refiero a la tercera marca, ¿desde cuándo se practica un agujero de 40 centímetros de diámetro y apenas diez de profundidad para clavar una estaca?. Y si sólo se trataba de una "cerca"(?) de dos palos, mucho peor.

4.-Es absolutamente falso que alrededor de los boquetes hubiera resto alguno de tierra. Las fotografías tomadas en el lugar hablan por sí solas. Después de treinta años de pesquisas creo que algo he aprendido.

5.-Jamás le dije a Claudeir Covo que "todo el terreno estuviera quemado". Hay cinco testigos que asistieron a dicha conversación. Lo que si manifesté es que, al examinar el "triángulo" y proceder a la recogida de insectos, plantas, etc, algunas de las piedras, insectos y flores presentaban claros signos de chamuscamiento o deshidratación, que es muy diferente.

6.-Respecto al árbol que se hallaba próximo a una de las marcas, prefiero que sean los científicos quienes se pronuncien al respecto. En aquella cena creo recordar que le comenté a Covo que dicho árbol aparecía sospechosamente seco. Nunca le dije que el ovni -o supuesto ovni- que pudo aterrizar en el lugar fuera responsable de dicha sequedad. Jamás pronuncié la palabra "quemadura". Es más: insistí en la necesidad de que el veredicto lo dieran las universidades...

Tercera serie de fotos sobre el caso. En esta ocasión, se pone de manifiesto la mala fe de las falsas acusaciones. 

Una de las marcas encontradas en Varginha. ¿Dónde está la tierra a la que alude el señor Ubirajara? Este investigador (?) miente. Sus palabras eran determinantes: "Son visibles los montones de tierra cerca de los huecos".

 

¿Agujeros de 20 y 24 centímetros de diámetro para plantar estacas de 6 u 8 cms.? Absurdo.

 

¿Dónde están las marcas del azadón? Las paredes de las huellas eran lisas. Perfectas. Incluso, con estrías paralelas al fondo...
¿Dónde aparecen los montones de tierra depositados junto a los boquetes?

 

Tampoco en esta huella se aprecian los supuestos montones de tierra que -según Ubirajara- "fue tirada y dejada allí mismo".

 

La ineptitud o mala fe de estos investigadores (?) brasileños les llevó a afirmar, incluso, que "dos individuos infelices -se refierre a Aníbal Alburquerque y Tadeu Pinto- me condujeron en Varginha a sitios equivocados". Como dicen en mi pueblo, por la boca muere el pez. Curioso: el autor de esta estupides -el señor Pacaccini- aparece fotografiado en el mismo lugar que J.J.Benítez.
(Imagen de Pacaccini publicada en Mufon UFO Journal. Septiembre de 1998)

 

Análisis de las universidades españolas.

Meses más tarde fue recibiendo la información procedente de las universidades españolas a las que solicité los correspondientes análisis. Por supuesto, no voy a extenderme aquí y ahora en tan farragoso texto. (A la vista de la infamante campaña desplegada en Brasil por estos individuos, puede que me anime a escribir un libro sobre el incidente en Varginha, incluyendo la totalidad de dichos estudios científicos. No era mi intención en 1996, pero...)

Pues bien, he aquí, sintetizados, algunos de los hallazgos de estos científicos:

* Universidad de Granada Departamento de Geología.
La tierra analizada, procedente del fondo de las huellas y de la zona comprendida dentro del "triángulo", presentaba unas interesantes e inexplicables "quemaduras". La cuarcita había sido sometida a una temperatura de 1.000°C. Pero lo más extraño que es que las muestras aparecían "abrasadas" por zonas. Nunca en su totalidad. Ahora resulta que los "azadones", además de excavar boquete cilíndricos, "abrasan"... Sin comentarios.

* Universidad de Granada. Departamento de biología animal y vegetal.
Según los expertos, los insectos tomados en el fondo de los boquetes y en el "triángulo" formado por las huellas presentaban evidentes signos de deshidratación. Esto no sería excesivamente raro, salvo un detalle para el que los científicos no tuvieron explicación: por lógica, al caer en un agujero, los insectos van muriendo y descomponiéndose de forma gradual. Los coleópteros analizados, sin embargo, aparecían todos en el mismo estado: "como si hubieran muerto a la vez". Dado que fueron recogidos casi diez meses después de los sucesos sucesos de Varginha, ¿Cómo explicar que no hubiera un sólo insecto con un grado diferente de descomposición?. Algo anormal, en efecto, terminó con ellos de forma instantánea. ¿Quizá el "azadón manual" de los señores Ubirajara y Pacaccini? ¿Un azadón capaz de deshidratar coleópteros? Mucho azadón me parece...

Fotografías extraídas de los informes de las universidades españolas.

Una de las muestras tomadas en el lugar del supuesto aterrizaje. La roca presenta quemaduras anormales. Señalada con la flecha, una de las áreas abrasadas.

 

Muestras de rocas preparadas para el análisis.

 

Inexplicable. Los insectos recojidos en el fondo de las huellas y en el "triángulo" murieron todos a la vez.

 

Una de las plantas examinada en la Universidad de Murcia. Deshidratada en un proceso muy rápido, momificada y sin restos de actividad bacteriana. Incomprensible para la ciencia. Los exámenes del sedimento superficial arrojaron datos similares: material deshidratado a gran velocidad (semillas, restos de hojas, tallos y estructuras florales), sin signos de combustión.

 

Una de las mustras del árbol, analizada por los expertos. No hay señales de combustión. La madera se encuentra "momificada".

* Universidad de Murcia. Departamento de botánica.
Según estos estudios, las flores recogidas en el lugar (boquetes y centro del triángulo) se encontraban "extraordinariamente deshidratadas". No hay signos de combustión. Proceso de deshidratación muy rápido. Y añade el informe: "proceso muy rápido debido a que se trata de una estructura de hipantio bastante carnosa que, en principio, parece susceptible de degradarse por la actividad fúngida y bacteriana antes que a momificarse, como es el caso. La preservación de esta estructura sólo se explica si ha sido arrancada y deshidratada artificialmente. Se halla libre de parásitos y hongos detritívoros y extraordinariamente seca, pero no descompuesta". Los expertos añaden: "inexplicable". ¿Flores libres de parásitos? ¿Modificadas? ¿Sometidas a un proceso muy rápido de deshidratación? Algo muy común, como saben todos los investigadores serios, en aterrizaje ovni. ¿O fueron los campesinos de Varginha los que momificaron las plantas?.


* Universidad de Valencia (antracología).
Las muestras de madera, tomadas del árbol que se hallaba en las proximidades de la huella número 2, presentaban las siguientes características: "ningún signo de combustión. La muestra no aparece carbonizada". Y se añade: "este tipo de muestras es el resultado de la acción combinada de altas temperaturas y una extrema escasez de precipitaciones. Estas características -lo que denominamos "momificación" o una especie de "fosilización"- sólo se registra en condiciones de extrema aridez. En estas circunstancias, la actividad de hongos y bacterias se ve muy minimizada y los restos vegetales se preservan excelentemente, a veces durante miles de años. No se trata de una fosilización en el sentido limitante de la geología tradicional, que demanda una mineralización del material orgánico".
¿Quemadura normal? Está claro que Claudair Covo se equivocaba. Las muestras del árbol no presentaban signos de combustión. Respecto al proceso de "momificación" que apuntan los científicos, obviamente, al no conocer la procedencia de la muestra ni las circunstancias en las que, presumiblemente, se vió envuelta la zona, la explicación sería correcta si Varginha fuera un desierto, por ejemplo. Pero la realidad no es ésa. Varginha es un punto con un altísimo índice de precipitaciones. Entonces, ¿Cuál puede ser la explicación para dicho proceso de "momificación"?. Para mí está claro: El árbol también se vió sometido, como los insectos, tierra y flores, a la acción del ovni. No es el primer caso, ni será el último...

Mapa pluviométrico de Brasil. Las precipitaciones en la zona de Varginha superan los 13 litros mensuales.

26.5 toneladas por punto de apoyo.

Por último, como también es habitual en las investigaciones que llevo a cabo, encomendé a un laboratorio especializado el cálculo, siempre aproximado, de la presión que sería necesaria para conseguir unas huellas como las que encontramos en Varginha. Ante la lógica imposibilidad de que los técnicos se desplazaran con sus equipos al lugar de autos, conseguimos una amplia muestra de la tierra en cuestión, proporcionandoles, obviamente, todas las medidas, imágenes y las características geográficas y pluviométricas. El estudio, finalmente, proporcionó el siguiente resultado:

peso (por puntos de apoyo):26,5 toneladas.

Creo que sobra todo comentario.

Sin embargo, a pesar de lo aplastante de estos análisis científicos, hechos públicos, y en rigurosa primicia, durante mi estancia Sao Paulo, uno de estos sujetos -el Sr. Ubirajara- volvió a la carga y en un programa de televisión emitido el 12 de diciembre (cuando me hallaba de regreso a España) se permitió soltar la siguiente majadería: "esas muestras empleadas para el laudo (estudio) no son inalteradas. Es un laudo absolutamente inconcluso e hipotético".

¡Bravo!. Lo que no mencionó este brillante investigador, ni tampoco el señor Prety, el tendencioso presentador del programa, es que esa observación, que se trataba de una prueba inalterada, ya fue expuesta por mí mismo en la conferencia en la que hicieron públicos los análisis. Curiosa y sospechosamente, Televisión Globo hizo creer a los espectadores que servidor había ocultado el dato. De nuevo la manipulación informativa... Pero vayamos a lo importa ¿El hecho, en este caso inevitable, de que la tierra no fuera inalterada (tomada en superficie) resta credibilidad y seriedad al estudio? Yo mismo he anunciado que se trataba de un cálculo próximado. 

Alfonso Betanzos, coordinador del estudio llevado a cabo por los laboratorios de la empresa "Vorsevi".

Y añadiré algo más: según los técnicos de "Vorsevi", la empresa responsable del análisis, de haber ejecutado el estudio sobre el terreno cabe la posibilidad de que esas 26,5 toneladas de prisión por punto de apoyo se quedaran cortas.

Informe completo de la empresa Vorsevi S.A. encargado por J.J.Benítez. 

¿Estudio hipotético? ¿Inconcluso? Que la muestra tomada en superficie no constituya un referente adecuado no quiere decir que el informe sea nulo. Puede ser aproximativo, como cualquier estudio técnico o científico, pero nunca falso. (Es más, la toma de superficie no es buen referente debido a su falta de compactación, es decir, es más fácil de perforar) . En este caso, la falsedad, como queda bien patente, hay que buscarla en el "lado oscuro" de la ufología...

J.J.Benítez

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